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Centro Provincial de Patrimonio Cultural (CPPC), Loma de San Juan, Monumentos, Museo de la Guerra Hispano-Cubana-Norteamericana, Santiago de Cuba
Por M.Sc. Miguel A. Gaínza Chacón
La tarja que identifica como Monumento Nacional al sitio histórico Loma de San Juan, en el este de esta ciudad, fue develada durante un acto político cultural que puso en marcha el programa del verano en el ámbito del Centro Provincial de Patrimonio Cultural (CPPC).
Liliana Vicario Torres y Angelina Ramos Franco, directora y especialista, respectivamente, del Museo de la Guerra Hispano-Cubana-Norteamericana, explicaron la significación histórica del lugar y dieron a conocer el texto “Loma de San Juan. Un Monumento Nacional”.
La actividad, que se desarrolló con la participación de directivos y trabajadores del CPPC y niñas y niños pioneros de la enseñanza elemental, recordó, además, el aniversario 119 del combate de San Juan y el 89 de haberse declarado el enclave como Sitio Histórico.
La Loma de San Juan, El Caney y Aguadores constituyeron los puntos relevantes del teatro de operaciones militares de mayo a julio de 1898, que siguieron al desembarco de tropas norteamericanas en el este de Santiago de Cuba, para inmiscuirse en la contienda que libraban el Ejército español y el Ejército Libertador, durante la última etapa de las guerras de los mambises (patriotas criollos) por la de independencia de Cuba.
El acto para develar la tarja tuvo dos momentos: el primero, en la entrada hacia el Árbol de la Paz, flanqueado por ocho enormes libros de bronce y cañones y morteros de finales del siglo XIX, y el segundo, que consistió en colocar ofrendas florales en los monumentos emplazados desde las primeras décadas del siglo XX, para perpetúar la memoria de oficiales y soldados de las tres fuerzas: española, norteamericana y cubana, caídos en los combates.
Suitberto Frutos, director del CPPC, leyó la resolución mediante la cual se declaró en 2016 como Monumento Nacional de la República de Cuba a la Loma de San Juan, al lado del Parque Zoológico de Santiago de Cuba.
Orisel Chacón, directora provincial de Cultura, y otros directivos de centros patrimoniales de la ciudad, asistieron a la ceremonia en el lugar declarado el 1 de julio de 1928 como Parque Histórico Conmemorativo San Juan.
Vestido a la usanza mambisa, Tomás Salazar Rodríguez, de la Casa de Cultura Josué País, escenificó el monólogo El comboyero amarillo, de Carlos Padrón, y luego él y una pionera colocaron las ofrendas florales en los monumentos ubicados en el promontorio precedido por un enorme cañón del crucero español Reina Merecedes, que en junio de 1898 fue emplazado en la zona de Punta Gorda, en la entrada de la bahía de Santiago de Cuba, y que en 1928 fuera estacionado definitivamente en San Juan, como reliquia histórica.
La ceremonia puso en marcha las actividades del CPPC en territorio santiaguero por la etapa del Verano, que incluye visitas dirigidas a lugares, museos e instalaciones patrimoniales.