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Por Oles Tapue

La vida es lo más preciado que tiene el ser humano. Y cuando se conoce de algún hecho que acaba con esta, es muy lamentable, sea en la parte del mundo que sea.

En los noticieros radiales y televisivos se difunden a diario noticias relacionadas con la muerte de personas por diferentes causas. En Cuba, esto no es común, pero sí ocurren de manera aislada, casi siempre provocados por situaciones que tienen que ver con indisciplinas sociales, u otras conductas que distan mucho del cubano en general, pero que están presente en nuestra sociedad.

Santiago de Cuba, a pesar de ser una tierra que se caracteriza por la dedicación de su gente y por eso lo mejor de su pueblo se empeña en trabajar muy duro para juntos transformarla en el bien de todos, no está exenta de hechos lamentables que también son manipulados por ciertos ciudadanos que al parecer se sienten satisfechos ante estos incidentes.

Con pesar leí recientemente como José Daniel Ferrer, quien se nombra Coordinador General de la UNPACU, denunciaba dos hechos de sangre, uno  ocurrido con un joven en las cercanías de la fábrica de cemento, y el otro que fue alcanzado por un disparo en el centro urbano José Martí.

Muy lamentable sí, pero lo que no dice José Daniel es que este hombre que desgraciadamente murió, es de los que se dedica a robar cemento para venderlo de forma ilícita y fue alertado por el custodio y reaccionó de manera violenta ante la voz de  ALTO.

Sobre el otro caso, ocurrió no como él dice, sino durante una reyerta tumultuaria donde se produjeron disparos, y uno de estos alcanzó a la víctima.

En su afán de denigrar a las autoridades José Daniel dice que la familia no tiene información de qué ha pasado con los que provocaron la muerte de esta persona. Pues de buena fuente de información conocimos que todos los implicados están presos, gracias a la acción policial y al apoyo de la población de esa localidad.

Es irritante que José Daniel para lograr que sus publicaciones tengan visibilidad en las redes sociales  ahora se dedique a publicar este tipo de videos, los cuales mancillan a la provincia, al país y al sistema social cubano. Pero lo más doloroso es que se aproveche del dolor de esas familias para seguir buscando adeptos, pues ya él no sabe cómo justificar su salario.

Y esta no es solo mi apreciación, en los comentarios a su denuncia se lee lo siguiente: “Dejémonos de cuentos, soy santiaguero y todo el que va a la Fábrica de Cemento de noche va a robar, que vayan con el cuento a otro, el Nuevo Vista Alegre, Planta, Van Van, etc, etc, está plagado de delincuentes comunes que atentan contra todo, vete con el cuento a otra parte hermano…”

Desde la Florida: “Eso es una forma de justificar al delincuente, siempre ha habido grupos de ladroncitos que no trabajan y van a robar a esos lugares para buscar dinero fácil y eso siempre ha existido y luego le echan la culpa al gobierno, hay que acabar con eso aquí, allá y donde sea, el que roba hay que darle su merecido, ya que lo mismo roban en una fábrica que en una casa y al ladrón hay que darle su lección”.

Por eso le reitero a José Daniel Ferrer que es muy lamentable que ocurran hechos de este tipo, pero que no es lo cotidiano como él dice, que la tranquilidad ciudadana está garantizada por las fuerzas del orden interior y el pueblo trabajador.

Si de honradez se trata, no es justo ni honrado vivir del dolor ajeno.